Carlos Benavídez fue elegido para realizar el trofeo que distingue al jugador con más títulos en la historia del fútbol.

Un escultura para el “dios” Messi, titula el artículo que habla sobre el trofeo que le entregó la revista deportiva Marca en octubre a Lionel Messi. Así, el futbolista argentino recibió su trofeo 103 en un evento especialmente organizado en el Chase Stadium de Miami. El MARCA AMERICA AWARD reconoció al campeón del mundo por su excepcional carrera, jalonada de récords individuales (56) y colectivos (46).

“La Revista Marca me convoca para esta distinción a Messi porque no querían hacer un trofeo tradicional sino hacer una escultura. Es un honor para mí representar a un campeón de campeones. Y como artista tengo la responsabilidad de contar la historia, la historia de la humanidad y de los personajes que la han transitado y Messi es uno que forma parte del presente y de la historia del fútbol”. explicó el escultor Carlos Benavídez.

Expresar el espíritu a través de la obra

Se trata de una escultura figurativa y expresionista en donde está representado un Leo celebrando un gol con el típico y carismático gesto suyo de agradecimiento a su abuela. “La posición elegida por Marca, con los dedos hacia arriba, es mucho más que un gesto. Es una conexión que hace con su abuela, en esos momentos de máximo éxito, cuando hace un gol. Simboliza el inicio de todo lo que él es, no nos olvidemos que lleva a su madre grabada en su piel, tiene un vínculo muy especial con su mujer y con sus hijos, además de la comunicación que tiene con la gente” describe Benavídez.
Para el artista era importante representarlo de pies a cabeza: “Propuse hacerlo de cuerpo entero porque él es una máquina perfecta y esa máquina perfecta funciona de pies a cabeza. Y esos dedos, son una antena que lo comunica con el más allá, que representa esa parte espiritual y emocional de contacto con su abuela, una mujer que tenía un vínculo muy particular con él y con su hermano”.

La Revista Marca le propuso a Benavidez incluir el símbolo de infinito en la escultura: “ Me puse a hacer una búsqueda para que este símbolo sea una fortaleza, tenga un significado que lo una con él” explicó. Para ello, el artista investigó en los Vedas, los cuatro textos más antiguos de la literatura india: “El tercer chakra es el del plexo solar, su color es dorado o amarillo oro, que es el que tiene la escultura. En ese lugar reside el poder, la capacidad de decisión de los seres humanos. Por eso ubicamos el infinito en el pecho de Messi, porque marca su personalidad. El símbolo de infinito es además movimiento o rueda, es el eterno movimiento que caracteriza al deportista.”, agregó.
La obra de arcilla creada por Benavídez se realizó en su taller de San Telmo. En base a esta obra, se realizó la escultura de 58,5 cm. de bronce en RUN Art Foundry de Miami, una de las mejores fundiciones del mundo, que pertenece a su amigo Uldis López.

“Gracias por este reconocimiento y por esta obra impresionante que fue con mucho cariño según las palabras que me dedicaron.” expresó Lionel Messi al finalizar el momento de premiación.

De Córdoba al mundo

Carlos Benavídez se formó como artista en la Facultad Nacional de Arquitectura y en la Escuela Nacional de Arte “Figueroa Alcorta” de la Ciudad de Córdoba. Al dejar su emprendimiento vinculado a la publicidad, comenzó su carrera escultórica en el año 2002 realizando su popular Serie Homenaje (Bustos de 20 cm) en la cual personificó a celebridades influyentes en diferentes ámbitos culturales de todos los tiempos.
“Desde entonces no paré. Hoy tengo mi taller en Buenos Aires, adonde me mudé en el 2011, porque la movida del arte en esta ciudad es muy importante”. recuerda.

Otras esculturas deportivas

Amante del deporte, a Carlos Benavidez le fascina hacer esculturas de deportistas: “Es un desafío hacer un deportista en su accionar, su musculatura, lo que está pensando, necesito meterme en la cabeza de ellos”.
En 2006 lo convocaron para hacer el primer monumento a Diego Maradona en Argentina, en el Club Ferroviario de Bahía Blanca. Se trata de una escultura de 2,6 m. y a partir de la cual se armó el Complejo Mundial FC. Después hace el primer monumento de Diego luego de su muerte, en Santiago del Estero. Inaugurado en el 2021, se trata de una pieza de 5 m. emplazada en el Estadio Único Madre de Ciudades. Con la particularidad de que esta escultura fue inaugurada por la selección argentina, y fue Messi quién destapó la obra. “Este es un antecedente importante que me lleva a ser convocado por Marca para hacer algo distinto a lo que venían haciendo para homenajear a un deportista”, destacó Benavídez.

La de Marca no es la primera escultura que el artista hace sobre Messi, puesto que ya le dedicó una, que lo representa más joven, en el Paseo de la Gloria de Puerto Madero. Inaugurada en 2017, esta serie homenajea a los 10 deportistas más importantes de la historia argentina con esculturas de 2 m de alto. Forman parte de este conjunto las esculturas de Manu Ginóbili, Gabriela Sabattini, Guillermo Vilas, Juan Manuel Fangio, Lionel Messi, Hugo Porta, Roberto De Vicenzo, Pascual Pérez, Luciana Aymar y José Meolans.

En su trayectoria, el artista cuenta con otras esculturas que homenajean a deportistas argentinos:
Ricardo Bochini (2005)
Club Atlético Independientes de Avellaneda
Escultura Homenaje – 2 m. de alto

Diego Armando Maradona (2006)
Mundial Fútbol Club, Bahía Blanca.
Escultura Homenaje – 2,7 m. de alto

Juan Manuel Fangio (2016)
Centro Universitario Virrey del Pino, Buenos Aires
Realizada para Mercedes Benz Argentina
Monumento que lo representa a escala humana.

Diego Armando Maradona – Niño (2017)
Bahía Blanca, Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Homenaje inaugurado en Mundial Fútbol Club del cual es Presidente Honorario.

Diego Armando Maradona (2021)
Estadio “Madre de Ciudades”, Santiago del Estero
5 mts. de bronce

Diego Armando Maradona – Las 10 del 10 (2022)
10 imágenes con la historia en poses y gambetas

Roberto De Vicenzo (2023)
Ranelagh Golf Club, Berazategui, Prov. De Buenos Aires
Homenaje en el 100 aniversario de su nacimiento.

“Mis esculturas tienen que decir algo y así traer sentimientos o pensamientos que el espectador no espera de una fuente que le es tan cotidiana como la escultura o el monumento”, concluyó Benavídez, quien ahora está trabajando en varios proyectos tanto para Estados Unidos como para Europa.